Historia

En el principio de los tiempos todas las razas convivían en paz, pero sobre todo paraíso acechan nubes de tormenta para oscurecer sus cielos. Los primero fueron los cambiantes, que sucumbiendo a sus bestias territoriales comenzaron a enfrentarse por su espacio sobre la tierra. Las más sangrientas batallas se libraron entre depredadores, leopardos y lobos realizaron masacres con los demás cambiantes y entre ellos. Pasaron siglos antes de que los líderes de los clanes se reunieran  en un mismo lugar para hablar de la situación, llegando a diferentes acuerdos sobre el territorio y llegando a un acuerdo de paz. No hace mucho desde las últimas negociaciones y todavía existen tensiones entre clanes pero los líderes de las nuevas generaciones se esfuerzan para conservar la paz y la alianza entre clanes.

Los humanos les siguieron, con sus enfrentamientos y guerras desde el principio de los tiempos. No importaba el motivos, los humanos siempre parecieron buscar destruirse los unos a los otros. Existió un tiempo en el que los humanos conocieron la existencia de las demás razas, durante la época más cruda de la Gran Guerra, pero cuando las batallas terminaron esos recuerdos fueron borrados de sus mentes y libros. Los humanos guardaban demasiado odio por la destrucción causada por la magia y jamás aceptarían la convivencia. Algunos de esos recuerdos siguen vivos en forma de cuentos populares, pero nadie puede imaginar donde empieza la realidad y donde acaba la ficción.

En los mares también nacieron los conflictos, un conflicto muy antiguo entre nereidas y tritones nacido del deseo de reconocimiento como reyes de los mares de los tritones. Las nereidas, consideradas como hijas de Poseidon, no podían aceptar tal afirmación y tampoco estaban dispuestas a someterse a los tritones. Sin embargo ambas razas nunca llegaron a enfrentarse en una batalla, se limitaron a distanciarse y a alimentar su odio mutuo. Así siguen en la actualidad, odiándose y evitándose en los amplios mares para evitar la guerra.

Por último se produjo la peor guerra de todas, una que movilizo a todas las razas presentes en este mundo, la que sería conocida como la Gran Guerra. Para explicar su comienzo es necesario remontarse a años de paz, cuando los brujos dedicaban su vida a cuidar el mundo que les había sido regalado por los dioses y su principal norma era no utilizar los dones que les habían sido entregados para fines egoístas. Pero no todos estaban de acuerdo con esa norma y empezaron a usar sus poderes para cumplir sus propios deseos, investigando las artes más oscuras para conseguir cada vez más poder. Esto fue lo que provocó el principio de la guerra, y con ella una división entre bandos que perduraría por el resto de los tiempos. La facción de la luz, formada por los brujos de luz y las razas que los apoyaron como las nereidas, dríadas y cambiantes. Y la facción de la oscuridad, formada por brujos oscuros, tritones, arpías y upir. El resto de razas aunque intentaron mantenerse al margen terminaron decantándose por uno u otro bando individualmente. En la actualidad se ha creado una tregua desde hace siglos que mantiene ambos bandos bajo control, pero las tensiones siguen presentes y la paz es ahora un fino hilo que amenaza con romperse en cualquier momento, algo que no puede permitirse o volverán a acumularse los cadáveres hasta cubrir el sol.